El origen de esta antigua imprenta está en la que con su hijo abrió D. José Fonseca en plaza de la Constitución 20 poco después de 1876, denominada La Minerva Española. En 1881 se funde con la imprenta de
José Santamaría dando lugar a la nueva y longeva imprenta La Minerva Extremeña en la calle San Juan 46. Figura entonces como dueña la sociedad formada por
José Maruri Ramos.
Aquilino Claramón Bermejo y Cª. Ante el fallecimiento del primero será Claramón quien desde 1885 tome el cargo de gerente y traslade los talleres a plaza de la Constitución 21 con
Antonio Abarrátegui y Vicen, regente y socio, pasando a titularse “La Minerva Extremeña de Claramón y Cª. Centro General de Modelación Impresa”. En julio de 1910, y disuelta ya la sociedad económica, la viuda de Claramón como propietaria única del establecimiento confiere su dirección y administración a
Antoliano Claramón González, su hijo. Al crédito alcanzado en el ejercicio contribuyeron los buenos oficios del tipógrafo
Ladislao Iserte prestados en La Minerva Extremeña, encargado de la confección del periódico La Región Extremeña hasta 1913 en que falleció.