Gregoria Jiménez al fallecimiento en 1893 de su marido, el tipógrafo
Constantino Álvarez, y ante la minoría de edad de sus tres hijos, quedó como titular de su imprenta. Al año siguiente, en 1894, el pie de imprenta de los periódicos que en ella se editan aparece nuevamente modificado: Tip. en Testamentaría de la Viuda de Álvarez, indicativo del fallecimiento de la titular.