Fernando Bravo y Bravo, ha cultivado varias actividades intelectuales, especialmente la poesía. Desde 1956 mantenía la costumbre de felicitar las Navidades con versos propios, en hojas que a él le gustaba llamar "navidales". A partir de 1957, Navida! se convirtió en Nabidal al readaptar su autor la Ortografía Fonélica de Gonzalo Correas, utilizando 24 fonemas, suprimiendo 6 y modificando otros.