En su nº 2 se expresaba que era "el periódico más moderno y el de más circulación de toda Extremadura", lo que le valió críticas que obligaron a explicaciones. Publicó artículos en favor de la creación de un Ateneo cacereño, y sobre la formación de la Federación Escolar Extremeña, publicando las conclusiones de la Asamblea Nacional de Estudiantes Españoles celebrado en noviembre de 1911; la mayor parte del espacio lo ocuparon las composiciones literarias de
Federico Reaño García,
Juan Luis Cordero, B. Gallardo,
Elisa Miura Pérez,
Francisco Acebal y
Julio Acha. A partir del nº 15 (23 de enero de 1912) dedica su tercera página al suplemento titulado
La Voz, redactado por estudiantes del Instituto General y Técnico,
Antonio Floriano Cumbreño,
Fernando García Gamonal,
Francisco M. Melgar,
Pedro Acedo,
Tomás Murillo... que justificaban así su publicación: "Por fin hemos realizado la idea de fundar un periódico, periódico que será reflejo de nuestras aspiraciones, que será eco de nuestras ideas, ya literarias, ya científicas".