Apareció tras el cierre del periódico
El Cruzado Extremeño. Sus responsables manifestaron en su primer número las intenciones de hacer un"semanario de verdadera información con corresponsales en Madrid, Cáceres y principales pueblos de este partido [...] No hará política pero procurará tener a sus lectores al corriente de cuanto en este espinoso campo ocurra". Su estancia en la escena periodística fue fugaz (Revista de Extremadura, año 1899, t. I, p. 144).