Gerónimo Orduña lo fue todo en El Avisador de Badajoz (fundador, editor, director, en ocasiones único redactor, e impresor), periódico que en su primera época salía jueves y domingos. Noticias oficiales de la administración, un extracto de las disposiciones del Boletín Oficial de la Provincia, mantenía una sección religiosa con el santoral y los cultos a celebrar, observaciones meteorológicas (suprimidas a partir del nº 31, por cuestiones surgidas con el director del Instituto de Badajoz,
Valeriano Ordóñez de Adrián y, bajo el epígrafe de "Gacetilla de la capital" incluía sucesos locales y anuncios, información de las novedades de la moda de París y Londres y del horario del servicio de diligencias "La Nueva Extremeña". Se convirtió en semanario en la siguiente etapa en la que el matiz conservador y católico se agudizó en grado sumo. Baste decir que el periódico deja de imprimirse en el establecimiento de Orduña por haber éste manifestado públicamente su consideración a
Rubén Landa, a quien considera persona honesta y digna (Crónica de Badajoz, 3 de agosto de 1887). Persiguió el despego a las prácticas piadosas y a los seguidores de la masonería.De pasada, tocó el tema del ferrocarril de Lisboa a Badajoz. El día 9 de agosto de 1883 publicó la reseña pormenorizada del pronunciamiento republicano en Badajoz. En 1887 aparece con nombre abreviado,
El Avisador, y redactado por
Mariano Gamero y
Ramiro Valbuena, iniciando así nueva numeración e incluso nuevo día de salida, el jueves. J. Gaspar, que tuvo a su cargo la redacción, lo imprimió en los últimos tiempos.