Oficina del impresor
Josef Cordero, clérigo secularizado, instalada en los años finales del siglo XVIII en el Rincón de San Nicolás, en la casa de los Varona y Vargas; precisamente las páginas de Instrucción de Cazadores, obra de José Varona y Vargas, fueron estampadas en dicho taller en 1798; pasaría luego a la calle de Coria conocida aun en 1930, por “calle de la Imprenta”. En 1827 seguía funcionando. Novenas, sermones. pastorales, discursos… constituían la base de su producción.